Shime-Saba: Prepare un sashimi de caballa perfecto en casa

La creación de una caballa curada excepcional comienza con el propio pescado. Empezamos con la caballa de Boston más fresca y de la más alta calidad, capturada y desembarcada por el Capitán Jack directamente en nuestro muelle de Gloucester, Massachusetts. La integridad de la carne del pescado es fundamental, ya que constituye la base de las delicadas texturas que se obtendrán.

Esta receta encarna nuestra filosofía: empezar con los mejores ingredientes y aplicar un proceso meticuloso. Hemos perfeccionado este método para lograr un equilibrio perfecto entre textura y sabor, transformando un pescado rico y graso en una experiencia culinaria delicada y sublime.

A continuación, se describe nuestro proceso exacto, desde la salazón inicial que reafirma la pulpa hasta el cuidadoso curado que logra ese característico acabado translúcido. Le invitamos a experimentar la calidad y precisión que definen el estándar Intershell en su propia cocina.


Shime-Saba: Make Perfect Sashimi Mackerel at Home

La receta predilecta de Intershell para la preparación japonesa se basa en el equilibrio. La clave reside en la proporción precisa de sal, vinagre y tiempo. Primero, se filetea la caballa más fresca con precisión quirúrgica. Luego viene la crucial etapa de salazón, donde el pescado se cubre generosamente con sal marina gruesa. Este paso es crucial: extrae la humedad, reafirma la carne y elimina cualquier sabor a pescado. Después de un tiempo específico, los filetes se enjuagan y se secan con palmaditas.

Ingredientes

  • Sal
  • Caballa de Boston entera grande (para cortar en filetes) – Descongelada si está congelada
  • Vinagre blanco
  • Recipiente de plástico (lo suficientemente largo para que quepan los filetes)
  • Pinzas – Para la extracción de huesos

Tiempo de preparación: 10 minutos | Tiempo de curado: 1-3 horas

  1. Filetear la caballa de Boston

  2. Coloque los filetes con la piel hacia abajo y la pulpa hacia arriba en el recipiente, asegurándose de que no se superpongan.

  3. Aplique una cantidad generosa de sal a los filetes; una capa generosa debería ser suficiente. Cuando la sal aún esté blanca después de salarlos, esta es la cantidad correcta. Evite que la sal entre en contacto directo con la piel. Durante la siguiente hora, la sal absorberá mucha humedad del pescado. Importante : El tiempo que deje reposar la sal en los filetes es el mismo que debe dejarlos en remojo en vinagre. El vinagre es más fuerte y penetrará la sal.

  4. Una hora después, sumerja los filetes en una solución de agua y vinagre al 30% y al 70% en el recipiente de plástico. Los filetes deben quedar completamente sumergidos en la solución para que se curen uniformemente; la pulpa debe empezar a adquirir un color blanco.

  5. Refrigerar los filetes en la solución de vinagre durante 1-3 horas.

  6. Una vez curado, retira los filetes de la solución de vinagre. Colócalos con la piel hacia arriba. Sécalos con papel absorbente.

  7. En la parte de la piel del filete hay una fina capa de piel, también conocida como membrana, que recubre el hermoso color iridiscente de la caballa. Sujete una esquina del pescado, ya sea por la parte superior o por la cola, y pele con cuidado solo la membrana. Si ve algo del color debajo de la membrana que se desprende durante el proceso, es porque la sal ha entrado en contacto con la piel (la sal hace que la piel se adhiera a la membrana).

  8. Retire las espinas del centro de los filetes: encuéntrelas pasando los dedos hacia arriba y hacia abajo sobre la carne.

  9. El pescado ya está listo para comer: córtalo en rodajas para hacer sashimi.